No fue la dulzura de tu risa,
ni la melodia de tu voz,
ni la elegancia de tu talle,
ni el misterio de tus ojos,
la belleza de tu alma,
eso fue lo que me enamoró
ni la melodia de tu voz,
ni la elegancia de tu talle,
ni el misterio de tus ojos,
la belleza de tu alma,
eso fue lo que me enamoró
Una preciosidad Elena... me encanta leerte ..
ResponderEliminarUn enorme y cálido abrazo
Es un honor que me leas, un abrazo Chon....Muaaaaks
ResponderEliminar