Todo queda en su lugar....
¡Quien te ha visto
y quien te ve!.
Tú que paseabas
orgullo,
chulería y vanidad.
Tú que presumías
de elegancia,
belleza y dignidad.
Tú que con dinero
la amistad,
el amor y el mundo
quisiste comprar.
Tú que amontonabas
cadáveres
en tu escalada social.
Tú que todo tenías,
ni una sonrisa
quisiste regalar.
Hoy que nada tienes
nada te han de dar.
Moraleja:
No todo se puede comprar.
© Irene Argos.
Es muy cierto. Lindas letras, beso
ResponderEliminarGracias siempre por estar, un abrazo Hanna
Eliminar